la Historia y Remodelación del Estadio Tetelo Vargas de las Estrellas Orientales
El Estadio Tetelo Vargas, ubicado en San Pedro de Macorís, es una joya del béisbol dominicano. Su nombre oficial fue adoptado hace más de medio siglo, el 9 de noviembre de 1963, en honor al legendario jugador de béisbol Juan Stevan Vargas Marcano, conocido como Tetelo Vargas. Este estadio, junto con el Estadio Quisqueya Juan Marichal en la capital y el Estadio Cibao en Santiago, forma parte del trío de estadios más antiguos e importantes del país.
Una Breve Historia
Inaugurado el 26 de octubre de 1959 como el «Estadio Oriental», este recinto deportivo ha sido el hogar de las Estrellas Orientales durante más de seis décadas. Desde su apertura, ha sido testigo de momentos memorables y ha albergado a generaciones de fanáticos apasionados del béisbol. Conocido también como «El Ramfis» por algunos, el Tetelo Vargas se ha mantenido como un símbolo de orgullo para la ciudad de San Pedro de Macorís y sus habitantes.
Renombramiento y Reconocimiento
Cuatro años después de su inauguración, por iniciativa del entonces presidente de la República Dominicana, profesor Juan Bosch, el estadio fue rebautizado como «Tetelo Vargas» para honrar la memoria de este ícono del béisbol dominicano. Este gesto resalta la importancia y el impacto que Tetelo Vargas tuvo en el deporte nacional, dejando un legado imborrable para las futuras generaciones de jugadores y aficionados.
Detalles y Remodelaciones
Con una capacidad de 8,000 asientos, el Estadio Tetelo es el estadio de béisbol más antiguo e importante del país junto con sus contrapartes en Santo Domingo y Santiago. A lo largo de los años, ha sido sometido a varias remodelaciones para mantener su estructura física y mejorar la experiencia de los espectadores. En 2007 y 2010, el estadio fue objeto de proyectos de construcción para renovar y ampliar áreas, mejorar el sistema de drenaje y actualizar las instalaciones, asegurando que continúe siendo un lugar de referencia para el béisbol dominicano.
El Estadio es mucho más que un lugar para jugar béisbol; es un símbolo de la pasión y el compromiso de los dominicanos con este deporte. Para los habitantes de San Pedro de Macorís, el Tetelo Vargas es un hito histórico y un lugar de encuentro donde se comparten emociones, recuerdos y la alegría del béisbol. Su importancia trasciende las líneas del campo, convirtiéndose en parte del tejido cultural y social de la región.
Con cada remodelación y cada juego disputado, el Estadio Tetelo Vargas continúa escribiendo su historia en las páginas del béisbol dominicano. Como hogar de las Estrellas Orientales, sigue siendo un lugar de encuentro para jugadores, fanáticos y amantes del deporte, asegurando que su legado perdure por muchas generaciones más
